Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.
Tratamientos Oculares -Trastornos Refractivos
TRASTORNOS REFRACTIVOS
Las alteraciones de la refracción del ojo son muy frecuentes en la población general y nos provocan que no veamos bien por incongruencia entre la longitud del ojo y la curvatura o simetría corneal.
Los principales tras tornos refractivos son:
MIOPÍA
HIPERMETROPÍA
ASTIGMATISMO
MIOPÍA
En ella la longitud del ojo es superior en relación a la curvatura corneal y del cristalino, por lo que las imágenes se enfocan delante de la retina y esto no nos permite ver bien sobre todo de lejos.
Las miopías leves no suelen desarrollar ningún problema asociado (MIOPÍA SIMPLE), las miopías medias y altas pueden originar complicaciones como un aumento de frecuencia de catarata, glaucoma, desprendimiento de retina o maculopatía (MIOPÍA PATOLÓGICA).
HIPERMETROPÍA
A la inversa que la anterior el ojo es más corto en relación a la curvatura corneal y potencia del cristalino, por lo que las imágenes se enfocan detrás de la retina originando mala visión, sobre todo de cerca.
En algunas ocasiones pueden provocar cefalea, irritación ocular o fatiga visual provocados por el esfuerzo de acomodación que hay que realizar para ver bien.
En las hipermetropías medias o altas pueden asociarse complicaciones como glaucoma agudo en los adultos o estrabismo y ojo vago en los niños.
ASTIGMATISMO
La córnea no es perfectamente simétrica o esférica en todos sus meridianos, por lo que la imagen llega deformada a la retina y vemos mal.
Puede asociarse a alguna de las dos anteriores.
Algunos astigmatismos, sobre todo si aumentan, pueden indicar la presencia de un queratocono que es un adelgazamiento y deformación progresivos de la córnea y que puede requerir tratamiento médico o quirúrgico.
Los trastornos refractivos deben ser siempre valorados por el MÉDICO OFTALMÓLOGO que es el profesional que puede diagnosticarlos y detectar o descartar alguna otra alteración asociada.
Esto es particularmente importante en los niños para así poder prevenir el desarrollo de ambliopía (ojo vago), detectando estas alteraciones de forma precoz y mejorando el pronóstico visual.
La forma habitual de corregir estos trastornos es el uso de gafas o lentillas, aunque también existe la posibilidad en adultos de corregirlos de forma definitiva mediante CIRUGÍA REFRACTIVA que puede realizarse con LÁSER EXCÍMER, FEMTOSEGUNDO, implante de lentes fáquicas (ICL) o cirugìa de cristalino fundamentalmente.